Kobbegem-Asse

He fet un salt, un salt gegant, qu m'ha aixecat més de tres pams...

y me ha traído a Bélgica, a Kobbegem, concretamente. Este es el cuarto día que llevo aquí y, he de reconocer, que mi intención inicial era comenzar este blog el viernes pasado, o el lunes (día oficial para empezar cosas, así, en general), pero he de reconocer que, aquí o donde sea, sigo siendo Xav, y un martes tampoco es tan mal día.

Acabo de descubrir que este es el tercer blog que creo, sé que no será el último, pero también sé, aliviada, que en cierto modo este cierra las dudas que aparecen en los anteriores, aquellos deseos de saltar un poco porque sí y un poco por escapar ...de lo que sea. Y aquí estoy, en un pueblo extraño y pequeño con vacas y avestruces y con seguramente muchas cosas más que aún no he descubierto, pero que espero conocer y que descubriré con ilusión ...o con tristeza, aunque esas no son en absoluto mis expectativas. 

(Pero de momento tengo que afirmar que EL MANNEKEN PIS NO ES PARA TANTO)